Una de las joyas del mundo de la IA generativa es HuggingChat, una alternativa libre a ChatGPT que ofrece un gran rendimiento y lo hace respetando la privacidad de las personas que lo utilizan. Y, curiosamente, muchos profesionales del ámbito educativo desconocen muchas de sus posibilidades.

HuggingChat tiene una interfaz y funcionalidades muy similar a ChatGPT y a otros asistentes conversacionales basados en grandes modelos de lenguaje. Ofrece una ventana en la que podemos escribir nuestra petición y el sistema genera un texto con la respuesta. Y podemos continuar una conversación para ir refinando las respuestas de la herramienta.

A diferencia de otros sistemas, sin embargo, HuggingChat permite trabajar con varios modelos diferentes. Todos ellos modelos que se comparten con alguna licencia abierta (al menos hasta cierto punto). En el momento de escribir estas líneas son 7 los modelos disponibles desde HuggingChat, pero constantemente se van añadiendo nuevos modelos según se van compartiendo con la comunidad:

Modelos HuggingChat

Esta flexibilidad es una gran noticia, ya que cada modelo puede ofrecer mejor rendimiento para diferentes tareas concretas. Aunque puede que estés pensando «¿estos modelos son mejores o peores que los modelos privativos como los de OpenAI o Claude?». Pues en líneas generales estos modelos son mejores que los modelos privativos gratuitos, aunque todavía tienen un rendimiento algo inferior a algunos de los modelos privativos de pago. Sin embargo, viendo la tendencia de los últimos meses, es evidente que la brecha se está cerrando a grandes pasos.

Otra gran diferencia con la mayoría de soluciones existentes es que HuggingChat se puede utilizar de manera completamente anónima, sin necesidad de crear una cuenta de usuario. No obstante, para las personas que así lo quieran, pueden crearse una cuenta en HuggingFace e iniciar sesión en HuggingChat para almacenar un histórico de sus conversaciones.

Hay que tener en cuenta que, de forma predeterminada, las conversaciones se comparten con las entidades que crean los modelos ofrecidos en HugginChat. Pero la herramienta ofrece la posibilidad de desactivar esta opción, de manera que las conversaciones no se usen para ningún uso posterior (incluidos fines de investigación o entrenamiento de modelos). Además, es posible eliminar cualquier conversación pasada en cualquier momento.

No compartir conversaciones

Estas dos características -poder usar la herramienta sin registro y que las conversaciones no se utilicen para entrenar futuros modelos- convierten a HuggingChat en una solución ideal para el ámbito educativo, protegiendo la privacidad y seguridad de docentes, estudiantes y familias al tiempo que se trabaja con modelos con un gran rendimiento.

Pero ¿el alumnado puede utilizar esta herramienta de manera autónoma?

Como en cualquier otro servicio que se ofrece a través de internet, es importante leer las condiciones de uso del mismo. En el caso de todos los servicios de HuggingFace se indica lo siguiente: Los Servicios no están dirigidos ni estructurados para atraer a niños menores de 13 años. En consecuencia, la Compañía no tiene intención de recopilar Información personal de ninguna persona que sepa que es menor de 13 años. La Compañía indicará a los usuarios potenciales menores de 13 años que no utilicen los Servicios.

Por tanto, es evidente que estudiantes menores de 13 años no pueden hacer uso de esta herramienta. Esto no es algo único de HuggingChat, ya que la mayor parte de soluciones prohíben su utilización para menores de 13 años e incluso para menores de 18 años (aunque algunas lo permiten para usuarios de entre 13 y 18 años si cuentan con autorización familiar).

Para terminar, un par de funcionalidades interesantes. Por un lado, HuggingChat permite activar la navegación web, de manera que el modelo trate de complementar su respuesta con información consultada en internet, lo que puede minimizar las alucinaciones y errores del modelo. Y por otra parte, con HuggingChat es posible crear nuestros propios asistentes personalizados, equivalentes a los CustomGPTs de OpenAI, pero que a diferencia de estos últimos sí pueden usarse de manera gratuita y anónima por cualquier persona. Pero esto lo dejamos para otro artículo en el que explicaremos paso a paso cómo se pueden construir este tipo de asistentes personalizados siguiendo algunos ejemplos.